El pasado 1 de enero se hizo efectiva la subida del 22% del salario mínimo interprofesional (SMI) a través del Real Decreto 1462/2018. Esta subida incrementa en 164€ mensuales el SMI, de forma que alcanzará los 900€ en todas las pagas. Sobre ello, hablamos hoy con Sagrario Anguiano, graduada social de Ascellence Consulting.
1. ¿A qué responde el aumento del SMI?
Según la exposición de motivos del Real Decreto, la subida del SMI viene marcada por una mejora de las condiciones económicas y tiene como objetivo prevenir la pobreza y reducir las desigualdades salariales. También ha habido recomendaciones internacionales acerca de que el salario mínimo debía alcanzar el 60% del salario medio de los españoles.
2. ¿A qué trabajadores beneficiará en mayor medida este incremento?
Como cuantía retributiva mínima, se verán beneficiados, principalmente, los trabajadores contratados en modalidades de formación o aprendizaje, los trabajadores minusválidos que desarrollen su actividad en centros especiales de empleo y trabajadores cuyo sector no tenga convenio colectivo de aplicación, entre otros. También se verán afectadas las cotizaciones de las empleadas de hogar y de los trabajadores agrarios. Por su parte, como índice laboral, afectará a varias cuestiones, fundamentalmente a nóminas. Por ejemplo, beneficiará a trabajadores con embargos en sus nóminas, cuyo salario líquido aumentará y, por tanto, Hacienda recaudará menos. Otro colectivo que se beneficiará son los perceptores de prestaciones de desempleo porque el requisito para acceder a ellas se modifica, de modo que habrá más personas que la reciban, suponiendo un mayor desembolso para las arcas públicas.
3. Cuando se aprobó esta medida, se habló de un impacto negativo en la creación de empleo y en la cotización a la Seguridad Social, ¿qué consecuencias podría tener el aumento del SMI en la economía española?
Se prevé que haya una gran repercusión en las arcas públicas por la subida del SMI como índice laboral y en el empleo joven que, probablemente, descenderá porque las empresas reducirán el número de contrataciones para contener los costes laborales. La recaudación social tampoco crecerá con el incremento del SMI, y, además, la Administración Pública tendrá que costear la cotización de los subsidios de desempleo de mayores de 52 años, de cuidadores no profesionales y de excedencias por cuidado de los hijos y de dependientes. Entiendo que este incremento del SMI tiene consecuencias negativas porque se traduce en mayores costes para la Administración y no tanto en aumento del poder adquisitivo de los ciudadanos.
4. ¿Cómo es, en la actualidad, el SMI español con respecto al de otros países de la Unión Europea?
España se sitúa en el 8º puesto de los países de la Unión Europea en cuanto a salario mínimo. Se encuentra, por tanto, en una posición media-alta. En primer lugar, está Luxemburgo, que tiene un salaro mínimo de casi 5.000€ mensuales y, en última posición, Bulgaria, donde no llega a 300. Suecia, Noruega, Dinamarca, Islandia y Suiza no tienen fijado un SMI.
5. Este incremento del 22% es el mayor aumento del SMI de la democracia, ¿qué expectativas hay ahora respecto a este indicador?
Efectivamente, es el mayor incremento desde el año 1977, pero los economistas españoles opinan que incentivará la economía sumergida, generará más desempleo en colectivos vulnerables y empeorará la competitividad de las empresas. Aún así, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, señaló que, en 2020, el SMI podrá ascender hasta los 1.000 euros, tal y como prometió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.